Parte I. La Fundación Bíblica
Lección 4. Sus Acciones y Resultados: Días Uno y Dos
 
Resumen e Introducción.
 
La creación bíblica comienza con nuestra discusión sobre Dios, el hecho de que Su perspectiva es diferente, el reporte de Sus acciones en la Biblia, y el ingrediente con el que comenzó a crear el universo (Su palabra u orden). Esto es distinto a considerar una perspectiva impersonal o naturalista del universo. También examinamos la injerencia de Dios en Su creación, en términos de revisión y control de calidad, analizando palabras y pasajes concretos de las Escrituras.
 
También hablamos sobre la importancia de las palabras elegidas por Dios en el reporte que nos dio. Los principios importantes para estudiar ese reporte incluyen prestar atención al significado literal de las palabras y oraciones al igual que entender las múltiples referencias que hablan del mismo tema. Estos principios adquieren importancia a medida que las lecciones progresan, porque examinaremos versículos específicos. Haremos menos lecturas, pero examinaremos más las palabras y frases para asegurarnos de entender lo que Dios nos dice.
 
Estas lecciones cubren los dos primeros días de la creación tal como los encontramos en Génesis 1:1-8, que debemos leer ahora.
 
El Chef Maestro Comienza.
 
En la última lección, presentamos la primera frase (“En el principio”) del reporte de la creación bíblica que Dios nos dio. Al igual que en una carta o postal, donde las personas comienzan escribiendo la fecha, Dios nos presenta el tiempo creado. Él, siendo eterno, creó el tiempo para Sus propósitos, que incluyen el comunicar el principio de su trabajo de creación. El resto de la oración es simple. Lee por tu cuenta las palabras que se usan. En una oración, tenemos tiempo, tierra y cielos en sus formas originales. Este famoso principio, tan bien conocido y tan a menudo desechado, merece que lo analicemos bien. Génesis no nos da a entender que haya nada involucrado ni presente en el principio más allá de Dios. El verbo que se usa en este versículo, en pasado, y el sujeto, Dios, no dejan lugar para ningún otro mecanismo. Es simple. El Dios eterno creó.
 
Un Patrón Para Observar.
 
Con el paso de los días (los seis días de la creación), hay algunos patrones en los que reparar. Se repiten para nuestro beneficio –no para el Suyo, porque Él es eterno y conoce todas las cosas. Pero nosotros no podemos saberlas a menos que Él nos las diga. Si nos repite algo o nos muestra un patrón distintivo, tomamos nota. Uno de esos patrones se muestra en cada uno de los seis primeros días de la creación. (Él descansó en el séptimo día, pero podemos asumir que ese séptimo día tuvo la misma duración que los otros seis.) Démosle una breve mirada, porque las implicaciones son profundas y la información que nos ofrece es impactantemente distinta de cualquier otra perspectiva.
 
Lee la última oración de cada uno de los siguientes versículos de Génesis 1: 5, 8, 13, 19, 23 y 31.
 
Escribe la frase y discute cada una de las siguientes preguntas:
 
¿Hay una forma más clara de asegurarse de que entendamos que los eventos de cada día de la creación ocurrieron durante un periodo de tiempo, común y reconocible, que conocemos como un día solar (24 horas)? [Nota de investigación: ordinary days]
 
Asumiendo el significado literal de las palabras, ¿hay otra interpretación razonable del tiempo que duró cada día de la creación?
 
Se han dado otras definiciones, pero los expertos de la creación bíblica, estudiosos de la Palabra que creen en la infalibilidad de la Biblia, y estudiosos judíos de importancia clave (ya que esto fue escrito en hebreo) han llegado a la misma conclusión: cada día es en verdad un día solar, o una rotación completa de la tierra. Hay también varios estudios y artículos que comparan la frase con otras partes de la escritura donde se usan términos o frases similares. La respuesta es la misma: esos días son días regulares de 24 horas de duración. Nosotros, como la audiencia objetiva de Dios, debemos ver esto sin confusión alguna. Más tarde daremos otras fuentes y referencias para aquellos que deseen investigar más este asunto.
 
Como lector, fíjate en que el primer versículo del Génesis da fe del primer evento que se reporta al principio del primer día. El Autor de la afirmación sabe lo que está diciendo, y pone una frase al final de cada día para que podamos marcar el tiempo con Él a medida que explica el resto de lo que hace.
 
Día 1.
 
Por favor, fíjate en el versículo 2. ¿De qué manera se identifica Dios a Sí mismo en este versículo?
 
Aquí tenemos la primera vez en que se menciona el Espíritu de Dios. Se menciona en muchas otras escrituras. Una referencia muy conocida es Juan 14:15-21, donde se describen Sus propósitos, después que Jesús es resucitado. En este caso, el Espíritu de Dios se describe flotando de forma atenta y dispuesta –listo para actuar sobre un cielo y una tierra aún en formación. No hay pérdida de tiempo cuando Dios actúa.
 
Por favor, fíjate en los versículos que siguen y haz una lista de las cosas que son creadas o alteradas en Génesis 1:3.
 
Nota el control de calidad y la conclusión de Dios en el versículo 4 con respecto a lo que ha creado.
 
Nota cómo Dios nombra a la luz y a la oscuridad tal y como aparecen ante nosotros en la tierra.
 
Nota la afirmación que da fin al día, y la forma en que está dicha en la última oración del versículo 5.
 
Lee 1 Juan 1:5, Juan 1:5, y Juan 8:12 que se refieren a Dios como luz –en el sentido de santidad perfecta, en contraste con la oscuridad moral. Pero la luz física fue creada por Dios en el primer día de la creación. Al final del día 1, tenemos ciclos de días y noches. De ahí podemos deducir que la tierra ha empezado a rotar, y que la luz llega desde una dirección fija. La fuente original de luz de este día 1 (no se nos dice exactamente qué es) no puede ser el sol, ya que este no es creado hasta el día 4, después de lo cual la luz del día 1 ya no es necesaria. [Nota de investigación: light before sun]
 
Fíjate en que no se menciona ninguna aparición gradual de la tierra. La tierra, aunque desordenada y vacía, es establecida junto con los cielos y es descrita como “aguas.” En cierto sentido, es una esfera de agua sobre la nada, lo cual coincide con la descripción de la tierra en Job 26:7. Su forma esférica se menciona en Isaías 40:22. (La idea de una tierra plana nunca fue parte de la perspectiva bíblica.)
 
Día 2.
 
Lee Génesis 1:6-8, que describe los eventos de la creación del segundo día. Este parece ser el día más corto en términos de la cantidad de cosas que se hicieron en él, pero tiene un resultado en verdad magnífico. Este momento de la creación separa las aguas de las aguas –debajo y encima de la expansión que fue nombrada “cielo” por el Señor. Desde nuestro punto de vista, ya que Él nos está dando información intencionalmente, tenemos una definición comprensible. Estamos en la tierra; podemos mirar hacia arriba y ver los “cielos” o “expansión” –un espacio que continuará siendo cambiado a medida que continúe la creación. La parte de la “expansión” que vemos mejor o que mejor apreciamos es la atmósfera. Piensa en las preciosas características de la atmósfera. Es fácil olvidar la importancia de este detalle porque siempre hemos vivido en ella. Pero considera sus componentes, densidad y características, que se mantienen en un delicado equilibrio. Sin sus componentes y sus características, nada puede vivir ni crecer. La forma en que el sonido viaja en el aire depende por completo de sus características. Su espesor alrededor de la tierra es extremadamente superficial, pero es el espesor correcto para la vida, el clima y el vuelo.
 
Más allá de la atmósfera, tenemos más espacio, que es algo creado. El espacio es inusual. Para nosotros, es como un gran contenedor de las cosas que se crearon el Día 4, pero el espacio es una entidad creada. Hacia el final de los primeros dos días tenemos tiempo, espacio, materia, algo de movimiento (rotación), energía inherente, una tierra acuosa y una atmósfera que espera por la siguiente orden del Chef Maestro.